Estamos ante un hecho insólito en la Europa contemporánea. La izquierda (que siempre ha llevado por bandera el laicismo) está tomando un rumbo un tanto peligroso: ir de la mano del fundamentalismo islámico. Porque supone que así se le va a diferenciar de la extrema derecha.

Lo cierto es que estas corrientes a las que está abrazando la actual izquierda son precisamente el bando de la extrema derecha en los países musulmanes. No hay más que indagar en las posiciones que promueven. Esto pone en evidencia a una izquierda extravagante, débil y sin rumbo.

Hace unos días, compartí una mesa de debate con compañeras de lucha del movimiento feminista. Todas expusimos nuestra visión de lo que es el feminismo. Mi compañera y yo íbamos a explicar lo que era la plataforma a la que pertenecemos: ‘Amnat Thawra’. Yo lo hacía desde un punto de vista laico (crítico con el velo) y mi compañera desde un punto de vista islámico (a favor del velo). El turno de mi compañera, que es feminista musulmana, tuvo una acogida agradable, ya que fue muy interesante su exposición. Todas estuvimos atentas a su discurso, ya que estuvo a la altura del debate. Hasta aquí, todo transcurrió con normalidad. Tocó mi turno.

Expliqué mi posición sobre el velo y el feminismo islámico. Resulta que no gustó mi perspectiva. Una de las invitadas a la mesa de debate se levantó indignada porque según ella “se estaba tratando un tema que pone el enfoque sólo en la vestimenta de la mujer”. Además, alegó que al no haber una feminista musulmana en el debate, no se tenía que hablar de ellas (que conste que mi compañera de plataforma – feminista musulmana – estuvo presente vía skype durante media hora explicando su postura). La catedrática que también estuvo invitada, y es miembro activo del partido político Podemos, discrepó también de mi visión, dando a entender que sería propia del colonialismo.

Hubo un parón incómodo, ya que las invitadas no querían que se abordara el tema. Sentí como si me quisieran dirigir la intervención, cuando yo en todo momento respeté sus turnos. Una de ellas dijo incluso que yo estaba echando tierra sobre las feministas musulmanas. Por supuesto, el público no compartió el comportamiento que tuvieron mis compañeras que, además, no mostraron respeto ni prestaron a mi intervención la atención que yo sí presté a las suyas (murmuraban y reían entre ellas constantemente).

Por lo visto, esto va a ser el pan de cada día: el de la censura y la mofa sobre mi perspectiva respecto al hiyab.

Y es que en mi intervención defendí que el hiyab es un símbolo de opresión. Y que los movimientos mal llamados “feminismo musulmán” legitiman la opresión que miles de mujeres árabes de raíces musulmanas sufren por no llevar el velo. Como bien dice Wassyla Tamzali:  “El velo no es una elección, sino un consentimiento”.

El feminismo es un movimiento de liberación. Por tanto, es incompatible con la defensa del uso del hiyab. Este elemento es un símbolo de dominación masculina, de subordinación de la mujer bajo la figura masculina. El velo fundamentalista es no exhibir tu libertad, es obediencia, modestia y un sin fin de características que el patriarcado islámico impone a la mujer. Llevar velo es abdicar ante el salafismo. Llevar velo es ser ejemplo de mujer ‘pura’. Y renunciar al velo tiene consecuencias graves para las mujeres musulmanas.

El feminismo no está hecho para quienes quieren luchar por los derechos de la mujer desde su zona de confort. Permitidme cuestionar a quienes opten por esta vía.

La censura que estamos sufriendo las feministas laicas de raíces musulmanas en España no tiene lógica alguna. Y es que la izquierda prefiere estar del lado de aquellos que omiten de manera consciente la opresión que sufren las mujeres musulmanas, pues no defienden el feminismo, sino sus creencias, pero lo camuflan a través del movimiento.

Porque si realmente su lucha fuera feminista, no le pondrían un apellido para justificar la opresión de la mujer árabe musulmana y menos para omitir las barbaries que sufren las mujeres musulmanas que no cumplen con el estereotipo impuesto por la sociedad musulmana. Muchos posmodernistas y relativistas de la izquierda y los movimiento feministas promueven y apoyan el discurso de las feministas islámicas, sin tener en cuenta el daño irreparable que hacen a una mayoría silenciosa y temerosa.

Que no se olviden de que la visión de este colectivo es la dominante en los países árabes porque son quienes ostentan el poder (absoluto).

Los derechos humanos son universales. Por tanto no pueden ser representados como culturalmente relativos: una niña menor de edad no puede tener la capacidad suficiente como para decidir llevar el velo. Se debe proteger a esas niñas.

Estos movimientos, que más que en un ideario feminista se basan en la defensa de sus creencias, no sólo legitiman la opresión de miles de mujeres musulmanas, sino que se han convertido uno de los factores de radicalización de esas niñas o adolescentes. Adolescentes que viven en Europa y que se encuentran en una etapa de confusión: por un lado está lo que se les ha inculcado y lo que se espera de ellas por parte de su familia/sociedad, y por otro, el mundo exterior, el de la libertad de elección sin adoctrinamiento ni temor a las consecuencias que ello pueda acarrear.

Resulta que cualquier crítica dirigida a las ‘feministas islámicas’, te convierte automáticamente en islamófoba o imperialista cultural. Se te someterá a todo tipo de censuras. Las feministas laicas (musulmanas) somos conscientes del riesgo de que la extrema derecha puede apoderarse del discurso para justificar su repudio de la comunidad musulmana, su férrea defensa de la exclusión de este colectivo. Pero ello no debe servirnos como excusa para callar ante la opresión del patriarcado islámico, ni ante el silencio mediático al que estamos sometidas. No somos nosotras las que huimos de los espacios moderados para hacer uso de nuestra legítima libertad de expresión: más bien es al contrario.

No soy partidaria de boicotear estos movimientos (como sí hacen con nosotras), pero sí de hacer visibles los movimientos árabes feministas laicos para que se puedan escuchar con la misma intensidad ambos colectivos.

Las ‘feministas islámicas’ se están apoderando de mi voz como laica y de la de miles de mujeres, además de focalizar toda su lucha en el hiyab, a favor del hiyab (Luego, cuando opinas sobre ello, te acusan de machista por hablar sobre su vestimenta). Lo grave es que no se están abriendo espacios en los que se pueda cuestionar lo que ellas, de manera hegemónica y absoluta, enarbolan en todos los lugares.

Es algo que pone en entredicho la democracia europea y muy en especial la española. No sólo estamos vetadas en nuestros respectivos países, sino en Europa, que es la cuna de la democracia, lo cual es insólito. Por tanto, exigimos que se abran espacios donde pueda ser escuchada nuestra voz. Donde podamos concienciar a las futuras feministas musulmanas desde nuestra perspectiva laica. Lo exigimos por higiene democrática.

Nasa Iahdih Said. Activista feminista y saharaui. Seguir en Twitter

18 comentarios sobre “La censura

  1. Otra que acaba de descubrir que se ha metido por error en una organización quintacolumnista de la dictatocracia musulmana. Si quieres saber quién te esclaviza, sólo tienes que averiguar a quién no está permitido criticar. En otras palabras, que no se muerde la mano que te da de comer.

    Las posturas de la izquierda política y mediática no se explican salvo sabiendo que se arruinaron económicamente hace décadas por su nefasta gestión, y ahora subsisten únicamente del dinero que le prestan dictatocracias esclavistas comunistas como la China y las musulmanas.
    Lógicamente, estas dictatocracias no son caritativas, y esperan algo a cambio de sus favores. El pago es que dinamiten al país por dentro para que su posterior invasión y conquista sean pan comido.
    Ejemplo práctico: invadir Venezuela y expoliar sus enormes recursos antes de Chávez hubiera sido dificil y costoso, porque se podían costear un ejército inmenso, y tenían muchísimos aliados entre los países que le compraban el petróleo para defenderlos. Por eso financiaron a un traidor para que «incompetentemente» destruyera todas las alianzas con otros países, luego se cargase todo el tejido productivo del país. Y ya de remate, financiar el terrorismo contra su propia población para anularla, desunirla y debilitarla.

    Y esto que describo es la hoja de ruta que la Internacional Socialista les escribió a Chávez y al PSOE (por eso Zapatero es tan amiguito del Chavismo y de ETA). Y si no me cree, pregúntese por qué en un país con un problema de excedente de generación de energía, el PSOE eligió hipotecar por 30 años a los españoles malversando TRESCIENTOS MIL MILLONES DE EUROS en paneles solares obsoletos, siendo éstos no sólo la energía más ineficiente y cara del mundo (y para nada ecológica debido a las tierras raras), sino curiosamente una tecnología cuya producción controla enteramente China.
    Y si China se lleva esa mordida, imagínese las contraprestaciones que se llevarán las teocracias musulmanas. Como muestra, el botón de Moratinos proclamando con alegría el «año de Marruecos» tras las bombas en los trenes, y la extraña exigencia de su Rey porque les regalaran el Sáhara español.

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  2. Nasa, cuenta con mi comprensión y apoyo, no estáis solas, somos much@s los que compartimos tu postura, seguimos luchando por un feminismo laico en el mundo y que en las sociedades mayoritariamente musulmanas es HEROICO.

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  3. Hola buenas, me llamo Edgar (EdgarBoldu en twitter si me quieres contestar) y me parece que tu visión es muy interesante y me gustaría, si fuera posible, hacerte una mini-entrevista para saber más de ti, como por ejemplo donde te criaste y cuando decidise no llevar más el velo, reacción de la família etc.
    Resulta conozco a más chicas musulmanas de distintos paises. En mi caso vivo en Edimburgo y incluso trabajo con alguna que justamente no lleva velo y tiene un sentimiento de libertad, de querer hacer lo que ella quiere y en su caso su família era bastante abierta con el tema, una família, por otro lado que hace tiempo muchos años que no viven en su país de origen (Iraq) pero a la vez defiende bastante a su religión en otros temas. Y me gustaría, hacer un artículo con una recopilación de experiencias personales de distintas mujeres que han decidido no llevar el velo.

    Si lees este comentario y te interesa la idea simplemente enviame un mensaje privado por twitter y lo seguimos hablando por allí.

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  4. Mi comentario en las redes ha sido este. A ver si abris los ojos quienes aun seguís a Podemos y demas fascistas. Teneis que leer la denuncia de esta mujer saharauy, feminista LAICA que ve como el verdadero feminismo NO EXISTE y en su lugar solo hay una farsa que defiende ante todo..al ISLÁM. Añado que ahora, aqui, lo mas liberalizador y de sentido comun que hay es lo calificado por los máss media de *extrema derecha*. Integrantes de VOX, como Alicia V. Rubio,la jocosa artista Sofia Rincón, Bertrand Ndongo, Santiago Abascal, et, DICEN EXACTAMENTE LO MISMITO QUE TU Y QUE LO PENSAMOS LA MAYORÍA DE ESPAÑOLES.

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  5. desde que oi a una monja de unos setenta años decir que toda mujer que muestra su cabello es una prostituta dije, paso de velos. despues llege a la conclusion de que no hay nada de malo en espectaculos o publicaciones con contenido sexual,aunque con esto discrepan muchas feministas. recuerdo a las mismas adolescentes que conoci siendo niño. las que hablaban mal de las azafatas de la tv, escandalizandose de una pintada en una playa en la que decia no al toples no se en que quedan. y desde luego no soy de los que dicen la culpa es de los padres que las visten como putas , para la mayoria de feministas e islamistas cualquier muestra publica de algo sexual aunque sea minimo es pecaminoso. el velo de cualquier tipo se usa a diario algo que no ocurre con el maquillaje, tacones etc. y tampoco me gusta el se usa para gustar a otros,cualquier tipo de velo se usa para gustar a otros. o tambien para gustarse asi misma ¿no?. pero en cuanto alguien se queja del uso como ocurre con el caso de holanda, los racistas y los fchas especialmente los que hablan de la conspiracion judeomasonica o comunista se unen, acaban diciendo que es marxismo cultural.

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      1. hay una diferencia entre oponerse al uso del velo y ser un facha o racista. en cuanto alguien se opone al uso del velo, aparecen racistas y fascistas apoyandole y diciendo que se vuelvan a sus paises.

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      2. Sigue SIN COLAR. Tu igual eres de los que defiendes que vengan los open ass a Europa. Permiteme corregirte. Si defiendes esa BARBARIDAD el racista y *facha* eres TU. Porque crees que Africa es una inutil y hay que mantener a los africanos en Europa con el peligro, expolio y fascismo que eso conlleva ya que toda esta locura obedece a un plan de islamizacion y sustitucion de raza y pueblo que la inmensa mayoria de europeos se ha de tragar con patatas les guste o no y no se debe a las necesidades naturales del mercado a las cuales no nos oponemos. Ahi va un estupendo video de Pilar Baselga y un videoclip de la RESISTENCIA a la cual pertenezco. https://www.youtube.com/watch?v=rMGEd-wkyZI&lc=z22lvv5q1yi0slolmacdp434puykt1tkd0ksqzqq4w5w03c010c.1566318730314485 y el videoclip, muy divertido, je,je,je….. https://www.youtube.com/watch?v=uCOIGfEjrGE&feature=share

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      3. no puedo verlo, internet no va muy bien ultimamente. y me opongo a la expulsion de musulmanes y cualquier emigrante.hay que ver como te pones cuando alguien discrepa contigo mujer.

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  6. Enhorabuena, ha descubierto usted la verdadera cara de la izquierda, esa ideología totalitaria cuyo principio fundamental es el odio, el resentimiento.

    Cuanto antes se salga de la secta, mejor le irá.

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  7. La situación que describes es una de las tantas que me hicieron abandonar el movimiento. Siento personalmente que la liberación de la que tú perfectamente hablas no está fielmente representado aparentemente por el feminismo actual, al menos no en su mayoría. Es lo que yo como diseñadora llamo, «La carencia de grises» los matices son importantes en los movimientos, te dan la libertad de moverte entre distintos puntos de vistas y buscar el mismo fin. Yo por mi parte simplemente dejé de llamarme feminista, tengo sed de nuevos movimientos lejos de las dictaduras y el totalitarismo.

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